A los 59 años Sarkisian logró el triunfo con el 58 por ciento de los votos en las elecciones
presidenciales realizadas este lunes. Su oponente principal, el ex
ministro de Relaciones Exteriores, Raffi Hovannisian, obtuvo el 36 % de los
sufragios, según los resultados obtenidos en más del 30% de las
circunscripciones. La comisión electoral central comunicó que la participación
del electorado armenio fue del 60 por ciento.
Por otra parte, el ex primer ministro Hrant
Bagratian y el ex disidente soviético Paruir Hairikian obtuvieron apenas 3% de
votos respectivamente, de acuerdo a un sondeo a boca de urna elaborado por el
instituto Gallup, que ubicaba a Sarkisian con el 58% de votos.
Sarkisian es reelegido Foto: AFP
El portavoz del Partido Republicano de Sarkisian, Eduard Sharmazanov,
anunció luego de la publicación del sondeo de Gallup que el presidente saliente
"era el único favorito", y consideró a la jornada electoral como
"la mejor en la historia de la Armenia independiente", descartando
las sospechas de fraude.
A pesar de las declaraciones oficiales, Bagratian
denunció "infracciones masivas", y cree que habrá "acciones de
protesta".
El escrutinio estuvo vigilado por 600 observadores internacionales. La Organización
para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE) emitirán luego un informe.
Otro de los datos llamativos de esta elección fue que tres de las
principales fuerzas de la oposición, que tienen 48 de los 131 escaños en el
Parlamento, no se postularon.
Desde el gobierno confían en que todo se desenvuelva con calma, pues
todavía queda el recuerdo de lo sucedido en 2008, cuando Sarkisian accede a la
presidencia y se produjeron duros enfrentamientos con las fuerzas policiales,
con un saldo de diez muertos.
El desarrollo de la campaña electoral fue de mucha tensión, manchada por
el intento de asesinato del candidato Paruir Hairikian, un ex disidente
soviético de 63 años, que fue atacado a tiros en pleno centro de Ereván y la
protesta con huelga de hambre de Andrias Gukasian, quien reclamaba que el
presidente retirara su candidatura para que pueda realizarse una elección
democrática.
Los temas que acapararon la atención en el transcurso de la campaña se
centraron en las dificultades económicas de la nación. En este sentido, el
Banco Mundial estima que el 36% de la población vive en condiciones por debajo
del umbral de la pobreza. En los últimos 20 años, un millón de armenios
emigraron del país escapando de las sombras del desempleo.
Armenia está ubicado en la región del Cáucaso, tiene 3 millones de
habitantes y no posee recursos petrolíferos como sus vecinos. El país enfrenta
distintas dificultades externas, ha quedado bloqueado por el cierre de las
fronteras con Azerbaiyán y Turquía.
Con los turcos mantienen un conflicto histórico por el tema del
genocidio armenio en la época del Imperio Otomano (1915-1917). La otra zona en
disputa es la de Nagorno-Karabaj, en donde Bakú y Ereván se disputan el control
de la región azerí controlada de facto por los armenios luego de una guerra que
dejó 30.000 víctimas entre 1988 y 1994, una antigua disputa con Azerbaiyán.
Las luchas y tensiones sobre estos territorios aparecen como una seria
amenaza para la estabilidad de la región, puesto que es un territorio que se
utiliza para el paso de oleoductos que transportan petróleo y gas natural a
Europa.
Sarkesian votando Foto: AP
Las
protestas, un síntoma de la disconformidad de parte de la ciudadanía
Los resultados de las elecciones provocaron cierta crispación en un
sector del pueblo armenio. Cerca de 5.000 personas se manifestaron en la
capital, Ereván, para dar a conocer su enojo con el presidente electo, Serge
Sarkisian, a quien acusan de haber triunfado en los comicios con métodos
fraudulentos.
"Armenia se merece el cumplimiento de la ley, la democracia, que
las leyes constitucionales se apliquen a todo el mundo, empezando por el
presidente y llegando hasta los ciudadano", afirmaba Raffi Hovanissian,
líder del principal partido de la oposición. "Y en este día los armenios
han venido juntos para reclamar nuestro destino, nuestra soberanía, nuestro
interés nacional y nuestro futuro como ciudadanos de Armenia”, concluyó.
Los observadores internacionales lamentaron la
falta de igualdad en las elecciones. No obstante, aseguran que han mejorado
respecto a ocasiones anteriores, a pesar de que sólo el 60% de la población se
acercó a votar el lunes.
Informe de Euronews
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